lunes, 18 de octubre de 2010

41. Nena, abrígate que viene un frente.

adn.es
A mi madre el frío no es que le asuste, le aterroriza. Olvídate de zombis, demonios, o plagas mundiales, tú a mi madre como mejor le puedes asustar es diciéndole:
-Mamá, he oído en el parte que viene una ola de frío.
Y se le eriza la piel como si hubiera visto al mismo diablo. A mi madre, el cambio climático no le parece tan malo porque va a hacer más calor. Y los nórdicos le dan un pena que no puede:
- Esa pobre gente, todo el año con frío a punto de coger un resfriado. Qué horror. Nena, si alguna vez hay una tercera guerra mundial tú te vas para el sur, que bastante jodida es una guerra como para que encima pases frío.
- Mamá... Has dicho "jodida"...
- ¡Nena, por Dios! Que te estoy hablando de una cosa muy seria, déjate de tonterías. Tú te vas para el sur, que con calor, el hambre es menos mala.
Sí, esa es la peor pesadilla de mi madre: su hija malcomiendo y muerta de frío. Su propia versión del apocalipsis.
Ella vive la meteorología como si fuera una telenovela. Está completamente enganchada. Tiene termómetros dentro y fuera de casa, una pequeña estación meteorología y una figura de una pastora con una oveja que cambia de color en función del tiempo. Le tiene una fe absoluta. Incluso le pone velas cuando quiere que pare de llover. Así que ayer me llamó, y me dice:
- Nena, ¿has sacado los abrigos de invierno? Que la oveja esta azul, azul. Y eso es que mañana viene un frente.
- Pues chica, aquí hace 20 grados. He estado tomándome un café en una terraza en la calle y se estaba tan agusto.
- Tú siempre estás en la calle, ¿en casa no tienes café? Ya son ganas de gastar, luego vienen los lloros de que no tienes dinero. Pero bueno, tú sabrás, ya eres mayor para perder el tiempo y el dinero en lo que quieras. Ahora, si te da por seguir siendo una derrochona mañana, te coges un abrigo, que la pastora está azul, y he visto la estación y da descenso de hasta 7 grados, y ya me estoy notando yo en esta rodilla que viene lluvia.
Coño, yo no sé para que España se gasta dinero en el Meteosat, si con una llamada a mi madre les bastaba. Ella cree en los meteorólogos cómo la gente en los astrólogos:
- Yo es que he sido muy de José Antonio Maldonado de la 1, que me acertaba mucho. Y se toma esto en serio, no como el muchacho de La Sexta que hace bromas. El tiempo es una cosa muy seria como para andar con jueguecitos Muy modernos eso es lo que son. Y también me gusta una chica nueva que hay en la 1 que tiene pinta de limpia, y cuenta muy bien todo: de dónde va dar el viento en cada provincia y bien clarito. Que en algunos canales sólo hablan de Madrid, y en provincias también nos enfríamos, y pillamos la gripe. Y más aquí, que un día te pilla el viento norte y te da un aire que te paraliza la cara. El de la Ser, ese que tiene nombre de mujer mayor, Florenci, ese, pues me hace gracia. Es demasiado optimista pero, chica, cuando se acerca el fin de semana sólo tengo ganas de oír buenas noticias, y llámame loca, pero le hago caso, y me acierta bastante, aunque ya te digo es muy optimista, y yo por si acaso siempre echo una chaqueta de más. Y bueno, mi pastora, que no me falla nunca, y hoy está azul. Así que mañana, no te olvides el abrigo.
Creo que si mi madre descubriera que en internet puede ver el tiempo que hace en todo el mundo, y todas las aplicaciones que hay sobre el clima, entraría en colapso.

Consecuencias del consejo:
No me sé abrigar sola. Llevo toda la vida escuchando qué debía ponerme la noche anterior. Incluso ahora que vivo lejos de mi madre, me llama y me informa. Así que, si un día no hablo con ella, o en Madrid el clima es distinto, me pilla por sorpresa, desabrigada. Yo a ella no se lo digo, porque si le digo que he pasado frío se echa a llorar y se lleva un disgusto enorme.
Otra consecuencia es que yo sufro mis resfriados en silencio. No le puedo decir que estoy mala porque me echa la bronca por no haberme abrigado, así que me inflo a Couldina y Lizipaina para que no me lo note en la voz cuando le llamo. Eso sí, luego tengo que aguantar cosas como:
- ¿Ves nena? Llevas 10 años sin cogerte un catarro, y todo por abrigarte bien. Ay... si me hicieras caso en todo, algo mejor te iría en la vida...

Excepciones para utilizar el consejo:
Futuros hijos míos, si algún día tomo alguna decisión en función del cambio de color de una oveja, podéis estamparla contra el suelo. Eso sí, si viene frío, os abrigáis, no os vaya a dar un aire.